El concepto “femicidio” puede sintetizarse
como la muerte violenta de una mujer por el abuso del poder de género y que se
produce en el seno de una relación de pareja, actual o pasada. En nuestro país
el número de estos delitos ha aumentado en los últimos años (una mujer
muere a la semana como víctima de este tipo de ataques y en 2010 ya se
registran 48).
Por esta razón, se ha incluido un tipo específico
en el marco jurídico-penal para sancionar estos crímenes que además responde:
- A un mandato Constitucional, representado en el deber del
Estado de propender al fortalecimiento de la familia, el derecho a la
vida, la integridad física y moral, y el derecho a no sufrir torturas ni
tratos inhumanos o degradantes.
- A un compromiso previamente adquirido por Chile, tras la
ratificación de la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y
erradicar la violencia contra la mujer.
Inclusión de ex cónyuges y ex convivientes como parricidas!
Esta medida extiende las penas del parricidio, que
son más fuertes que las de un homicidio común, al asesinato de una mujer a
manos de su ex marido o de su ex conviviente, de forma tal de que cuando
ocurran estos hechos, las penas sean equivalentes a las del parricidio, que van
desde los 15 años y un día, a la prisión perpetua calificada.
El femicidio de un ex cónyuge, al igual que el
parricidio, suele absorber una o más de las circunstancias o elementos
especiales previstos para el homicidio calificado (art. 391 Nº 2), sea en el
contexto de un ataque pasional (alevoso) o bien a consecuencia de un
ataque premeditado. En consecuencia, la penalidad debe ser mayor que
aquella consagrada para el homicidio simple, ya que en este caso – al igual que
en el parricidio – la condición de la víctima, así como la existencia de
una relación afectiva en el pasado, de la que pueden o no existir hijos, es el
móvil principal de la agresión.Éste es justamente el fundamento de la mayor
penalidad y que se equipare a los casos en que el vínculo subsiste.
La experiencia indica que los casos de violencia
intrafamiliar hacia un ex cónyuge son frecuentemente precedidos de otros
episodios violentos, como amenazas o lesiones. De hecho, en Chile una mujer se
demora en promedio 7 años en hacer una denuncia de VIF y el 73% de
las mujeres muertas por femicidio no registraban denuncias previas.
Modificaciones a la tipificación de los delitos
sexuales
La nueva ley también modifica la tipificación de
los delitos sexuales, facilitando su investigación. Especialmente beneficia las
indagaciones sobre los casos de violación conyugal, puesto que elimina la
necesidad de que la víctima haya opuesto resistencia y solamente requiere que
la víctima haya expresado su oposición. También se autoriza a prescindir de la
autorización del padre o madre que ha sido condenado por delitos sexuales,
cuando se quiere sacar a los hijos del país. Otra medida es que se
agravan las penas por delitos sexuales, cuando éstos son cometidos por dos
o más personas.
Medidas cautelares
Otro punto importante que abarca esta ley es que se
autoriza y encarga al Tribunal de Familia la adopción de todas las medidas
cautelares necesarias para proteger con eficacia a las víctimas de la
violencia intrafamiliar, aún antes de que el caso sea remitido al Ministerio
Público, eliminando así uno de los períodos más riesgosos para las víctimas de
violencia intrafamiliar.
Se duplica así el periodo de duración de las medidas accesorias a la
sentencia para agresores en causas de violencia intrafamiliar,
ampliándose éstas hasta dos años. Ejemplos: prohibición de
acercarse a la víctima, obligación de asistir a terapia, etc.
Con esto se busca evitar las situaciones en que las
mujeres maltratadas ya hayan alertado del peligro en que vivían, pero el
sistema público no tuvo las herramientas para protegerlas, lo que fnalmente
culmina en femicidios.
Se incluye también como situación de riesgo para
una mujer la negativa violenta de aceptar el término de una
relación de pareja.
Labor del Sernam
Durante la promulgación de la Ley de Femicidio, el ex Presidente Sebastián Piñera destacó las distintas tareas que el Servicio
Nacional de la Mujer lleva a cabo para aportar en la lucha contra la
Violencia Intra Familiar. Ejemplo de esta labor es su más reciente campaña
de prevención de la VIF y el programa Chile Acoge, destinado a prevenir el
problema entregando tratamiento a los agresores y también atención a las
víctimas, de forma tal de que se apoye a todas las personas que son parte de
este círculo vicioso. El año 2011 el Sernam iniciará, bajo un modelo
socio-educativo y trabajo grupal, 15 pilotos de atención de agresores, uno en
cada región.
El Sernam cuenta actualmente
con 94 Centros de la Mujer distribuidos en todas las regiones
del país y con 24 Casas de Acogida, cuyo objetivo es ofrecer protección
temporal a mujeres y sus hijos e hijas menores de 12 años en riesgo vital.

No hay comentarios:
Publicar un comentario